Yerba Buena es una de las 10 mejores ciudades de la Argentina para vivir, según un ranking nacional de calidad de vida elaborado por investigadores del Instituto de Geografía, Historia y Ciencias Sociales del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet).
Los científicos confrontaron datos de más de 525 unidades, entre departamentos y comunas. El municipio tucumano es el mejor posicionado de la provincia y del Norte. Incluso, quedó en el séptimo puesto del país en la categoría departamentos, y en el lugar 15 de la clasificación general.
El año pasado, los yerbabuenenses habían obtenido la misma ubicación, aunque se trataba de un rango de calidad ambiental. Esta vez, para elaborar la clasificación se tuvieron en cuenta esas variables, y se añadieron indicadores socieconómicos.
Los primeros criterios de valoración se refieren al tipo de relieve; a la presencia de espacios verdes y de espejos de agua; a la edificación de centros culturales, deportivos y de esparcimiento; a la cercanía de industrias contaminantes y a la posibilidad de sufrir inundaciones, tornados y movimientos sísmicos, entre otros aspectos. Los segundos indicadores tienen que ver con la educación, la salud y la vivienda.
- La calidad de vida es una medida de logro respecto de un nivel establecido como óptimo. Y depende de la escala de valores de una sociedad -dice Pablo Paolasso -41 años, geógrafo e investigador del Instituto Superior de Estudios Sociales de Tucumán-. Junto a su colega Fernando Longhi, efectuó el trabajo local, que luego pusieron a disposición de sus colegas de Buenos Aires.
- ¿Cómo se construye el índice? -se le preguntó a Paolasso.
- Está compuesto por cuatro variables, que son salud, vivienda, medio ambiente y educación. Y cada una ocupa un porcentaje: salud, el 35 %, vivienda, el 30 %, medio ambiente, el 20 % y educación el 15 %. La mayoría de los indicadores son objetivos, como mortalidad infantil, hacinamiento, educación o disponibilidad de obra social y de empleo. Se trata de datos censales.
- ¿A qué se debe que el departamento pedemontano haya superado a la capital?
- Las mediciones se vienen efectuando desde 1980, y siempre las ciudades del Norte argentino han ocupado los puestos inferiores. Yerba Buena, en cambio, es uno de los municipios del país que más ha crecido en términos demográficos en las últimas décadas, y en general se situó en buenas posiciones. En San Miguel de Tucumán no ha ocurrido eso. Si bien hubo una expansión urbana, la mayoría de los migrantes vienen del campo, y se trata de desempleados.
- ¿Por qué Yerba Buena tiene buena calidad?
- Evidentemente, las condiciones son mejores que en otros sitios. Para ejemplificar, la tasa de mortalidad infantil es baja, muchos de sus habitantes tienen obra social y completaron los tres niveles de educación.
También el líder del proyecto, Guillermo Velázquez -oriundo de Tandil e investigador principal del Conicet- opina que Yerba Buena ha quedado bien posicionada porque hay una relativa ausencia de problemas ambientales y porque cuenta con recursos recreativos, principalmente. “Eso les brinda a sus habitantes más posibilidades de disfrute”, explica.
En voz del tandilense, las personas que viven en los primeros sitios del listado tienen más posibilidades de ser felices, puesto que la relación de la gente con su entorno es insoslayable. “Para cuidar el puesto obtenido, es necesario se planifique el uso del territorio y se protejan los espacios verdes”, recomienda.
El ránking correspondiente a este año será dado a conocer en las próximas semanas, anticipó Velázquez. El primer puesto de los departamentos lo obtuvo la capital de Mendoza. La lista continúa con Vicente López, Ushuaia, San Isidro, Lago Argentino, San Juan Capital, Yerba Buena, Ciudad de Buenos Aires, Los Lagos (Santa Cruz), General Pueyrredón (Mar del Plata) y Bariloche. San Miguel de Tucumán se situó en la posición 149 de la nómina, en general.
LO HECHO Y LA PROMESA
El secretario de Gobierno de Yerba Buena, Héctor "Pilón" Aguirre, dice que es tiempo de limpiar la casa, de acomodarla y de mirar al futuro.
¿Cuáles son las mayores fortalezas del municipio?
La explosión de la obra pública ha sido impresionante. En los siete años que llevamos en el Gobierno municipal, hemos pavimentado 1.700 cuadras. Se trajeron bancos, comercios y sedes de organismos estatales que antes no había. Eso generó una nueva centralidad, porque la gente que vive aquí ya no necesita trasladarse a la capital. Fomentamos la radicación de hoteles y tenemos tres shoppings. Se pusieron cloacas. Nuestros vecinos tienen el cerro a sus espaldas y una avenida (la Perón) a la que pueden ir a hacer deportes. Vamos a seguir trabajando para ser los primeros de ese ranking, porque Yerba Buena tiene todas las condiciones.
¿Cuáles son las asignaturas pendientes?
Hasta aquí, hemos realizado grandes obras de infraestructura. Ahora vamos a abocarnos a reforestar la ciudad, a mejorar las plazas, a resolver las pérdidas de líquidos en las calles, a eliminar el cableado aéreo y a mejorar la recolección de la basura, entre otros aspectos. De hecho, queremos incorporar un sistema de separación de residuos. Es tiempo de limpiar la casa, de acomodarla, y de mirar al futuro.